Como decía, la escuela trata a la infancia como un peaje, como una etapa de preparación para ser adulto, pero no como una etapa en sí. La escuela no trata la infancia como un espacio propio del ser humano en el que está germinando una existencia independiente al ser una adulto trabajador.
esencia
¿Quieres una clase ordenada? Permite que se desordenen primero. (I) Notas prácticas.
En vez de decir a los niños: “¡Muévete!” o “¡Córrete para atrás!” e intentar ordenarles, nos paramos durante unos segundos y les pedimos que miren a su derecha y a su izquierda y que, en vez de decirles a los demás lo que tienen que hacer, sean ellos quienes se muevan y busquen un lugar desde el que el grupo esté “bien”. ¿Qué puedes hacer tú para que el círculo este ordenado? Se observan y dirigen su movimiento hacia el círculo.
La misión de la educación actual es ofreces espejos.
La misión de la educación no es ofrecer caminos sino ofrecer espejos; lugares desde los que encontrar nuestro centro sincero y poder crear desde ahí. Si queremos que los alumnos sean singulares y auténticos quizás, hemos de mostrarles la valentía del ser auténticos, la marejada que nos lleva a confiar en el fluir del mar. Los maestros tenemos que estar atentos a eso y ser conscientes de que “el maestro es un fuerza que imprime su resultado pasados varios años“. Tenemos que preparar a los alumnos para ese estado de ser en el mundo, para ese habitar la vida desde la consciencia. Es por eso que tenemos que educarles para SER, no para parecer o estar.
¿Quién dijo que no se podía viajar en el tiempo? (Feliz día de Reyes Magos)
La infancia es un espejo, hermoso; desde el que volver a abrazar a tu madre como si ya no te diera vergüenza. Desde el que poder mirar a tus padres como si fueran el centro de todo. La infancia es un espejo. La paternidad un viaje hacia tu infancia y el amar es recordar.